Una boda muy Baymo en Barcelona
Conozco a la diseñadora Mónica Aurell, diseñadora de la firma de invitadas de Baymo. En cuanto me contó que se casaba, quise que fuese una de las novias NARS de 2022. Ella y Juan se conocieron cuando eran pequeños en la Costa Brava. «En ese momento yo vivía en Londres por el trabajo de mi padre y cuando nos mudamos a Barcelona acabé yendo a su mismo colegio», me cuenta Mónica. Empezaron a salir hace quince años y se casaron el pasado fin de semana en la Ciudad Condal.
Como os contaba al principio, para el maquillaje contó con José Belmonte del equipo de NARS. «Antes de conocerle, tuve dos pruebas en las que no me terminaba de ver bien. En cuanto hicimos la prueba con José supe que iba a ser él quien me maquillara», recuerda.
José se centró principalmente en la piel, para que se viese bonita y natural, «la tiene increíble, unas cejas y estructura ósea perfectas y una mirada con muchísima expresión», asegura. Como base utilizó Light Reflecting; toques de Radiant Creamy Concealer en zona de ojeras; polvos de sol Laguna, y el blush Orgasm y con Copacabana; para sellar aplicó los polvos iluminadores Crystal y el lápiz de labios Sex Machine con el bálsamo de la línea Orgasm.
En los ojos utilizó tonos tierra y dorados para conseguir un look de noche y varias capas de máscara de pestañas Climax. José utilizó el primer Smudgeproof Eyeshadow para conseguir más fijación. «En la ceremonia me emocioné mucho y, aun así, el maquillaje siguió intacto. Jamás me habían preguntado tanto por un maquillaje como ese día.»
Mientras se preparaba, Mónica llevaba un bata de Broken Basics.
Mónica optó por un recogido del que se encargó Elena Salomón (607877528). Lo terminaron con un tocado vintage de L’Arca Barcelona. «Es una de mis tiendas favoritas. Fui a visitar a Carmina, la dueña, unos meses antes y me enamoré de la pieza, era exactamente lo que buscaba.»
Como joyas, Mónica llevó el anillo con el que Juan le pidió que se casara con él; otro anillo que le regalaron los padres del novio el día de la pedida; la pulsera que le regalaron los testigos de la boda unos meses antes; y unos pendientes diseñados con Alejandra, la fundadora de Leandra, que le regalaron sus padres.
Decidió que no se encargaría ella de diseñar y confeccionar su vestido de novia. «Tenía muchas ideas y tenía clarísimo que quería vivir esta experiencia colaborando con una de mis diseñadoras favoritas de Barcelona: Teresa Helbig«. Se basaron en uno de los vestidos en Baymo con detalles como el cuello plisado y nido de abeja en los hombros. «¡Trabajar con Teresa ha sido muy emocionante!, asegura Mónica.
«Viéndolo con perspectiva puedo reafirmar que ha sido la mejor decisión» sobre todo porque tan solo 48 horas antes de la boda, Mónica y su equipo estaban terminando la nueva colección de invitada de Baymo. Muchas invitadas de la boda, llevaban los nuevos diseños de la firma.
Los zapatos eran de Flor de Asoka que se venden en la tienda de The Muse Collective de Barcelona.
Del ramo y el resto de flores se encargó Teresa Molmen (607987655). Mónica y su madre se reunieron con ella y decidieron centrarse en las plantas de un bosque húmedo como el musgo, helecho o encina para reflejar ese bosque desordenado en el que, de repente, nace alguna flor.
Juan, el novio, llevaba un chaqué a medida en color azul marino de Fossman y una corbata que le regaló su hermano pequeño el día de la boda.
La ceremonia religiosa fue en la iglesia de Sant Pau Del Camp, «la descubrimos, por casualidad, paseando por el centro de Barcelona y nos enamoró», me cuenta Mónica que, además es la más antigua de Barcelona.
Los niños iban vestidos con diseños a medida de Margarita Umbert.
Mónica y Juan tenían claro que querían celebrar la boda en el centro y escogieron la Universidad de Barcelona para organizar un aperitivo en el jardín botánico y claustro de naranjos; y, después, la cena y fiesta en el vestíbulo principal. El catering lo sirvió Aspic con los platos favoritos de los novios (chuletón, croquetas y quesos).
Como la boda era de noche, contaron con la iluminación de Adis JMC que colocaron micro luces en los centros de mesa que se asemejaban a luciérnagas. El alquiler del menaje y otros objetos lo hicieron en Abanik y la papelería fue obra de Marta, prima de la novia. Contaron con la ayuda de las wedding planers Animae21 Events.
Para la fiesta, «queríamos ese efecto “concierto” después de cenar y antes del dj». Para ello, eligieron al grupo que está revolucionando las bodas en Barcelona, Los amigos del novio. «Fue realmente espectacular y no paramos de bailar y cantar temazos».
Abrieron el baile con She de Elvis Costelo y el dj fue Adri Lozano, «nos lo recomendaron muchísimo y sin duda fue un acierto total.»
Todas las fotos son de Berta de la Presa y el vídeo de Bebi Puig Pey.