La boda de Ana y Julián en Asturias

Ana y Julián se conocieron hace seis años en Madrid, aunque ambos son gallegos, su historia de amor ha estado marcada por la distancia, ya que durante más de cuatro años vivieron en diferentes países: él en Londres y ella en Ginebra. El compromiso llegó de forma inesperada durante un viaje a Tokio. Una noche, justo antes de salir a cenar, Julián le pidió matrimonio.

“Conozco a Julio de Peluquería Suárez y confiaba en Reyes Tabarés para el maquillaje, así que no dudé en contar con ellos. Lo hicieron increíblemente bien, creando un ambiente familiar y haciéndonos sentir cómodas.”


“Tenía clarísimo que quería un vestido prêt-à-porter. Cuando fui a 6ème Gallerie fue un flechazo total: Menchu y todo el equipo fueron encantadoras, y la falda de Jorget de seda cruda con tablas me fascinó. Quería algo sencillo y añadimos solo un par de detalles: un drapeado de tul en los puños y el cuello.“

“Mi tía Marolas, que también es mi madrina, me regaló los zapatos de Isabel Marant. El perfume era Pure Musc de Narciso. También llevé unos pendientes de mi bisabuela y el anillo de pedida que me regaló Julián”.


“Un día me puse a pensar cómo podía incluir los lirios en mi look y como ya tenía ganas de llevar algo en la cabeza, se me ocurrió escribirle a Cris de Romualda para que me diseñara un sombrero.

“Tardamos casi cinco meses en encontrar un sitio que verdaderamente nos gustase estéticamente y cumpliese los requisitos que teníamos en mente: entorno rural, capilla consagrada… Encontramos de casualidad un Palacio con una capilla preciosa que nos encantó desde la primera vez que lo vimos.”

“Queríamos una decoración floral colorida y muy natural, como si todo se hubiese creado ese mismo día con lo que había en el palacio. Bea del Invernadero captó la idea perfectamente y la elevó con arreglos frescos y elementos orgánicos como cestos de mimbre y cerámica andaluza. Mi ramo siguió esa misma línea e incluí medallas de mis abuelos para tenerlos siempre presentes.”

“Julián se encargó personalmente de toda la música. Para la ceremonia contratamos un cuarteto de cuerda y una soprano de Tesitura Música. El Ave María cantado por Yolanda fue, sin duda, uno de los momentos más emocionantes de la boda.”



“Julián llevó un traje, corbata y pañuelo de Drake’s, acompañado con camisa de Santamaria y zapatos de Crockett and Jones.“



“Los chicos de Dia D Jazz animaron el aperitivo, que organizamos alrededor de la fuente rollo plaza del pueblo. Compusieron un set inspirado en clásicos del jazz y bossa-nova. Marta Papier diseñó la papelería en harmonía con las invitaciones y el resultado quedó precioso”.





“Del catering se encargó Diego del Restaurante Regueiro. Teníamos claro que queríamos dos grandes mesas imperiales.”


“La tradición de cortar la tarta nos encanta y nos hacía mucha ilusión. Paloma de Camilo de Blás convirtió su famoso milhojas, la tarta favorita de mi abuela, en una preciosa tarta nupcial. Además, el tío de Julián nos prestó su sable militar para cortar la tarta. Fue un momento súper divertido.”

“Abrimos el baile con The Wonder of You de Elvis. La música de la fiesta no era nada fácil, con un rango de edades muy amplio y casi diez nacionalidades diferentes. Una de las mejores decisiones fue contar con GRG Eventos.”



“Para las fotos contamos con Irene de Velban Photo. Hizo tanto analógicas como digitales, fue un puntazo.”