La boda de Julia y Luis en Sevilla
Julia y Luis se conocieron hace cinco años en Sevilla gracias a Miguel, un amigo en común. Se casaron en esta misma ciudad andaluza en noviembre en una boda que han organizado en tan solo tres meses. Luis le pidió que se casara con él a finales de agosto viendo el atardecer en el Cabo de San Vicente en Portugal, «suena súper romántico, pero había miles de personas allí», recuerda Julia.
El día de la boda, Julia contó con Manuel Cecilio para que se encargara del maquillaje y el peinado. «Fue tan fácil con él, lo decidimos todo sobre la marcha y fue un acierto total. Yo quería naturalidad ante todo y así lo hizo», asegura la novia. En ese momento, Julia llevaba el mismo camisón y la misma bata que utilizó su madre el día de su boda.
El vestido de novia lo hizo Manuel Obando. Julia le dijo «quiero que mi vestido sea un jardín» y el resultado final fue un diseño al que cosieron a mano flores, mariposas, libélulas, mariquitas y hormigas. «¡Quedó ideal y nos lo pasamos genial en las pruebas!».
Las joyas que llevó Julia eran todas familiares. Los pendientes y el broche de su abuela, la pulsera de pedida de su madre y el anillo de pedida que le regaló la familia de Luis.
Del ramo y la corona de flores se encargó Matilde Romero de Solís de Pétalo junto con su sobrina sobrina Micaela Alarcón de la Lastra y fue una sorpresa.
A la hora de elegir los zapatos, Julia quería un tacón cómodo para poder bailar. Eligió unos muy sencillos de Bimani.
La ceremonia religiosa fue en la Iglesia de Santa Cruz de la que Luis, el novio, es hermano.
El chaqué de Luis era de O´Kean Sastería y la camisa y corbata de La Puente.
A la salida de la Iglesia, Pepe, el dueño del bar La Fresquita, recibió a los novios con unas cerveza que sirvieron en unos vasos que grabó el padre del novio con el nombre de Julia y Luis.
Después, los novios e invitados continuaron la celebración en Hacienda Torrequemada que pertenece a la familia del novio. «¡Es preciosa!», asegura Julia.
Durante el aperitivo tocó en directo Planeta 80, un grupo de música de Córdoba.
Después de la ceremonia, Julia se puso el anillo con el que Luis le pidió que se casara con él.
Toda la decoración fue obra de Pétalo. «Cuando lo vi, me quedé sin palabras», me cuenta la novia. La mesa presidencial estaba llena de frutas, flores, velas en candelabros… También decoraron las columnas y la pista de baile con flores colgando. De la papelería se encargó una amiga de los novios, Anita, que pintó unos meseros con motivos náuticos porque el novio navega desde pequeño en barco de vela. «Nuestra mesa se llamaba Guadalmina como el velero de la familia de Luis».
El catering lo sirvió Alda & Terry, «nos decantamos por un riquísimo arroz con perdiz que ¡estaba espectacular!».
Para terminar, el dj fue Icon Experiences «que supo animar la fiesta cómo ningún otro, fue divertidísimo», me asegura Julia.
Todas las fotos son de Plata.forma y, «gracias a Pelayo, tenemos las fotos más bonitas del mundo». El vídeo es de Emotion Film, «el dueño de la empresa es íntimo amigo mío y no tuve duda en elegirlos».
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