En el taller de Tom Black

Durante sus comienzos, decían quienes les visitaban, que sus telas no eran rotundamente buenas y, como sabéis que cuido mucho mis consejos, remoloneé a la hora de hablar de ellos en el blog. Pero ahora, después de un par de años, de un cambio de proveedores de las telas y una fuerte evolución como negocio, aquí están.

He hecho un seguimiento exhaustivo de cómo han ejecutado un chaqué a medida para mi amigo Álvaro (que tenía la boda de su hermana) y me ha parecido que son una idea perfecta para los más jóvenes: un lugar donde hacerse un chaqué a medida, absolutamente personalizado, desde 500 €.

Jose Manuel, el sastre, es todo amabilidad y se ocupa personalmente de que todo salga perfecto, me recomienda se cierre una cita dos meses antes del evento para que haya margen de maniobra. ¿En cuanto a estilo? Son capaces de todo porque personalizan hasta el último botón. A mí me encantó en el que hicieron para Álvaro (en las fotos) que incluye sus iniciales en el bolsillo interior en tela de rayitas.

PD. Aprovecho este post para reivindicar el chaqué. Me parece elegantísimo (aunque difícil de llevar muy bien) y una tradición que me apena perder.

PD.2 Gracias a Serafín Castillo (fotógrafo de alguna boda del blog y encanto de persona) que se animó a venir a hacer estas fotos un sábado por la mañana, recién llegado de Málaga y teniendo que marcharse corriendo a una boda después. Esos detalles marcan la diferencia.