Casilda se casa

10 razones para comprar Vogue Novias

Ya está a la venta el nuevo número de Primavera Verano de Vogue Novias. El número 43. No creo que haya que dar motivos a nadie para comprarlo porque es evidente que es una preciosidad y un pozo de sabiduría y perfecta inspiración nupcial número tras número, pero por si acaso alguien no sabe qué puede encontrar en esta revista, os adelanto las diez que más me han gustado del número para ir abriendo boca.

-Las bodas de las novias reales que salen en sus páginas son insuperables. Cada una con sus detalles y en concreto esta de Alejandra y Marc, con un vestido diseñado por la novia, las maravillosas fotografías de Retrato de un Instante y unos niños de arras con botas cowboy que quiero en mi boda, es perfecta y muy muy original. Pronto os la mostraré con más detalle en el blog.

Retrato de un Instante

-Los bodegones de la estilista Ana Tovar siempre me han encantado y en este número se supera. Realizados en el showroom de Antiqbr (un descubrimiento) con muebles de Vintage Macassar, tarjetones caligrafiados por Josemaria Passalacqua, y flores de Brumalis y Sally L. Hambleton.

Fotografía de Mónica Suárez de Tángil. Realización: Ana Tovar

-Las novias que proponen en lsa producciones de moda siempre especiales y a su aire. Esta vez mi imagen favorita es esta con vestido de Laura Monge, velo de Desiderata y sandalias de Ancient Greek Sandals.

Fotografía de Borja Zausen. Realización de Marieta Torres.

-El vestido camisero con encajes de Marcela Mansergas. Siempre será mi favorita.

Fotógrafo Rubén Vega. Realización: Ángela Collantes

-Los zapatos de novia. Algo que Vogue siempre ha tenido claro es que las novias no llevan zapatos convencionales. Por eso proponen miles de zapatos que no son blancos y forrados, como estas sandalias rosas de Manolo Blahnik.

-Algo azul. El pasado número fue del rosa, esta vez es del azul. En encaje me debería disgustar pero me encanta.

-Mientras que los ramos que salen este número no me gustan especialmente, las coronas de flores me encantan todas. Esta es de Brumalis y se la pondría a cualquier niño o novia que se preste.

Brumalis

-Un sitio de celebración de bodas que para mi es parte de mi vida: Soto de Monzanaque. Allí trabajé como camarera con quince años y empecé a descubrir los entresijos de una boda. Un reportaje de la mano de Blanca Sueves, su dueña, que dará ganas de sólo casarte ahí.

-La sección de regalos de boda. Con platos pintados de Alberto Pino para Pía Rubio como estos.

-La boda de mi hermana Carmen con todos los detalles en los que la pude ayudar. Vestido de Nacho Aguayo y ramo de Sally L. Hambleton peinada por Art Lab.

Click10