Cosas que aprendí organizando una boda
Me da cierto pudor dar el peñazo con esta boda tan mía. Pero creo que debo contaros los descubrimientos que hice organizando la boda de mi hermana, parecen obviedades pero pueden serviros. De momento 10:
1. El sitio, la hora y el lugar, condicionan mucho. Parece una obviedad pero a veces no paras a pensar que si te casas en una iglesia importante, renuncias a un vestido hippie y si lo haces de noche no puedes ir de ninfa primaveral. Y así con todo. Decide bien qué clase de boda quieres.
-Mi hermana se casó en Santa Bárbara, una iglesia preciosa de Madrid pero que no permite elegir fotógrafo, ni vídeo ni la música de la ceremonia. El lugar condiciona y, en este caso, mucho.
2. El vestido condiciona también. Condiciona los pajes, el ramo, los zapatos, el peinado y el maquillaje. Todo eso no se decide hasta que esté listo el vestido.
-Si al final llevas detalles azules en el vestido, luego no cuadran unos niños vestidos de rosa palo. Acaba con el vestido y empieza con el resto. Nosotras no caimos en este detalle aunque al final todo cuadró.
3. Haz tantas pruebas de maquillaje y pelo como sean necesarias.
-Mi hermana necesitó dos en Art Lab para decidirse entre trenza o recogido. El gustazo de unos profesionales agradables hace que todo sea más cómodo. Os recomiendo muchísimo este centro estético y en concreto el trabajo de Cristina Barbero a los pinceles y de Beatriz Mora con el pelo. Aconsejan tratamientos previos para la novia, te ponen en manos de un colorista y te dejan perfecta.
4. No hay nada como un plan relajante y en familia unos días antes del evento para recordar lo importante y reírse un poco.
-Nosotras fuimos a MyLittleMomó a hacernos las uñas y Teresa y sus chicas nos hicieron sentir como en el salón de casa, además de hacernos los mejores tratamientos. Manicura y pedicura permanente para la novia y manicuras brasileñas para el resto.
5. A los profesionales hay que dejarles crear.
-Gente como Sally L. Hambleton, a la que solo le dijimos que queríamos un ramo con tonos azules y nos hizo esta maravilla, es con la que da gusto contar. No hace falta que explique nada más de esta gran decoradora floral, todas sus creaciones son maravillosas.
6. A veces las pequeñas firmas son las que mejor hacen el trabajo. O al menos con más ilusión.
–Mariluz y Loreto de Brumalis se animaron a hacer por primera vez una boda con nosotras (os enseñaré el resultado porque fue espectacular), Farfala Bodas, iluminadores de teatro hicieron un montaje muy especial sin haber hecho casi bodas y Diego Estrada, joven diseñador de 23 años, diseñó y confeccionó los vestidos de las madres de los novios y de las abuelas. A todos os los recomiendo encarecidamente.
7. No hay que cerrarse a nada.
– Yo siempre odié los fotomatones y después de ver el de Flash Flash Box, en la boda de mi hermana, me convertí en fanática de este invento. Un éxito absoluto.
8. El trato es uno de los datos más importantes para decidir contratar a alguien.
-Alvaro Talayero se convirtió en mi ídolo como maquillador y también como persona durante los momentos previos de la boda. Mirad la foto de abajo, el pobre tuvo que peinar y maquillar a varios miembros de una familia numerosa enloquecida y lo hizo con una sonrisa y sin pestañear.
9. Mi DJ favorito es Miguel Sagüés de Play-it.
-Más desde que, en la boda de mi hermana, llevó a un saxofonista para el cóctel, de los que convierten el evento en una fiesta especial. Luego pinchando demostró que es un profesional, hace lo que quiere, pero lo hace muy bien.
1o. Las invitadas más elegantes son las más discretas.
Loreto, una de las mejores amigas de mi hermana, llevó este vestido de Color Nude y me pareció una de las invitadas más espectaculares que he visto nunca.
CONTINUARÁ…