La boda de Lucía Páramo y Pascu en Madrid

Del maquillaje se encargó José Belmonte con NARS. «Para mí era un honor que alguien a quien admiro tanto me maquillara el día de mi boda, pero después de todos los preparativos descubrí el gran corazón que tiene y lo buena persona que es. Ya se lo dije, pero el momento en el que estuvimos los dos solos durante el maquillaje fue un momento de muchísima paz que nunca voy a olvidar. Y cómo no, de la mano de NARS y sus productos con los que siempre me veo guapísima. Además regalé mini  Blush Orgasm entre las invitadas y estaban felices».

José explica así el maquillaje que le hizo: «Lucía quería un maquillaje muy natural, pero con el que se viese muy favorecida.

Para la piel, utilicé dos productos que siempre recomiendo a las novias: el fondo de maquillaje de Light Reflecting Foundation, un híbrido entre tratamiento y maquillaje que deja un acabado muy luminoso, y unos ligeros toques del corrector Radiant Creamy concealer.  Con el polvo bronceador Laguna, marqué el contorno del rostro dando un toque ligero de tono bronceado. En las mejillas añadí un toque de rubor aplicando primero Afterglow Liquid Blush y después el Blush en polvo, ambos en el tono Orgasm. Esta combinación es ideal para conseguir dar más intensidad al acabado y una mayor duración del maquillaje. En los ojos un smokey muy ligero en tonos tierra con la máscara Climax como protagonista para marcar la mirada. Por último, los labios muy naturales e hidratados con Afterglow Sensual shine Lipstick en el tono Truth or dare para intensificar su propio color natural».

La bata y el camisón con los que se maquilló eran de María Lamadrid

«Para el momento del maquillaje y peinado me puse las alpargatas de Castañer x Casilda se casa».

El vestido lo diseñó Flor Fuertes. «Conozco a Flor desde hace muchos años y siempre ha sido de mis diseñadoras favoritas. Me parece que tiene un gusto muy especial, unos tejidos increíbles y las mezclas que hace con ellos siempre me han encantado. Además, me gustaba mucho de ella que capta muy bien la esencia de cada novia y adapta cada vestido a su personalidad. La delicadeza con la que hace todo y su humildad, en definitiva. Cada prueba era como estar en familia y lo pasamos genial durante todo el proceso del vestido. Por otro lado, tuve claro desde antes de casarme que me hiciera lo que me hiciera el día de mi boda llevaría algún bordado de Victoria de By Luneville. Siempre he admirado su trabajo y todo lo que hace es especial, pura artesanía. Hay poca gente en España hoy en día que trabaje los bordados como ella y me apetecía muchísimo que algo suyo tuviera una importancia especial en el vestido. También tuve claro desde el minuto uno que quería un vestido con el que me viera yo siempre, el día de la boda y en veinte años. Sencillo pero con detalles especiales. Me inspiré en el vestido de novia de mi madre adaptándolo a hoy en día y los bordados del vestido eran espigas en tonos cobre y plata, un homenaje a mi abuelo que ya no está».

«Llevé mi anillo de pedida que fue un regalo que me hizo Pascual ese día y es de Gómez Zuloaga».

«De pendientes llevé unos largos vintage de Joyas Sardinero que me regaló de sorpresa mi tío la semana antes de la boda y fue un regalo que no esperaba y me hizo muchísima ilusión. Eran preciosos, Art Decó y muy fieles a mi estilo».

«También quise hacer un guiño a mis dos abuelas y llevé un broche de brillantes que perteneció a mi abuela para recoger la capita que llevaba en la iglesia con el vestido, y un anillo de mi abuela que sí que pudo estar que siempre le quitaba cuando era pequeña y me encantaba».

«Me costó muchísimo dar con los zapatos que tenía en la cabeza. Tenían que ser cerrados, especiales, en colores neutros y a poder ser vintage. Pero no encontraba nada, y cuando ya iba a darlo por imposible, encontré un par que me parecieron perfecto en Vinted. Eran de Gucci vintage y además los pude estrenar yo. Fueron un regalo de mi hermano Tomás y mi cuñada María».

«Del peinado se encargó Kérastase con Iván y decidimos hacer un moño tipo bailarina muy pulido y bien peinado para luego poder soltarme el pelo. Siempre que tengo una ocasión especial cuento con Iván y ya sabe perfectamente lo que quiero».

El ramo lo hizo Lucía de El Taller de Lucía. «Tuve confianza plena en ella y no lo vi hasta la mañana de la boda. Me apetecía algo silvestre pero cuidado. La verdad es que me encantó el resultado».

Se casaron en la ermita de Nuestra Señora de la Paz. «Para mi familia es un sitio muy importante y una tradición que todos nos casemos ahí. Es como estar en casa y de mis momentos favoritos de la boda fue ir el día anterior con nuestras dos familias para preparar todo, vestir a la Virgen de la Paz, poner la alfombra, colocar los manteles. Es un momento precioso en el que participa toda mi familia y se implican en todos los detalles».

Para la entrada a la iglesia contaron con Hakuna Group Music. «Era el momento más importante del día y queríamos que en la iglesia todo estuviera perfecto, además vinieron a cantar amigos míos del grupo Hakuna y fue un regalazo increíble poder contar con ellos».

Los niños iban vestidos con diseños a medida de Mentxu By The Riverside. «Nos llevaron las arras nuestros sobrinos. Me hizo muy feliz contar con Mentxu porque desde que descubrí todo lo que hace me fascina. Es otra de las personas que he conocido últimamente que trabaja de forma artesanal con un gusto por los detalles maravilloso».

«Pascu llevaba un chaqué a medida que le hizo un sastre amigo de su familia y una corbata que le regalé yo cuando empezamos a salir y que es muy especial para él. También llevaba unos gemelos preciosos para tener a su abuela con él de alguna manera, ya que no pudo acompañarnos, se los regaló hace unos meses. Los mandó hacer para él con parte de su anillo de pedida y el anillo de boda de su abuelo. Fue un detalle muy bonito y especial».

Celebraron la boda en el Palacio de Aldovea. «Fui el año pasado ahí para la boda de unos amigos y me sorprendió porque nunca había estado. Además la comida me pareció un diez así que cuando decidimos buscar sitios para celebrar la boda solo miramos este y nos ha parecido todo un acierto».

«Bego de Mano de Santa hizo un trabajo espectacular. Ayudándome con todo, organizando, teniendo todo bajo control. En un principio solo íbamos a hacer con ellos la coordinación de la boda pero finalmente terminó siendo parte fundamental en toda la organización e hizo un trabajo impecable. La recomiendo muchísimo».

«El día que fuimos a ver la finca con nuestros padres, mi suegra dijo que la parte donde sería la cena al aire libre le recordaba a la Toscana, así que a mí como buena apasionada de Italia eso me dio la idea para hacer una boda inspirada en ese país. Como una cena de verano en la Toscana al aire libre. Les di esa idea a Lucía de El Taller de Lucía y a Begoña nuestra wedding planner de Mano de Santa y ellas ya se encargaron del resto. No vi nada hasta ese mismo día y sin duda superó toda expectativa que pudiéramos tener. Del menaje se encargó Options y quedaron unas mesas ideales y muy acordes con la temática».

«Toda la papelería de la boda corrió a cargo de la pintora Alejandra Marroquín (a.corot). En cuanto conocí su trabajo supe que quería trabajar con ella, y eso que no suele hacer cosas para bodas. Le estamos muy agradecidos porque nos hizo las invitaciones, los meseros, el seating y las minutas. Quedó todo increíble. Ella se encargó de todo el diseño y luego lo imprimimos en una imprenta de un familiar».

«Para la fiesta no lo dudamos ni un momento y contamos con Adrián Lozano. Con él la fiesta está asegurada y además en mi grupo de amigas como decimos nos ha casado a todas (y somos diez) y por eso ya es tradición que al decidir que nos casamos lo primero que hagamos sea pedirle disponibilidad a él. Todo el mundo acabó encantado, desde los mayores hasta los más pequeños. Repetiríamos una y mil veces».

Las fotografías las han hecho el equipo de Click 10 fotografía . «Son como familia para nosotros y no pudimos estar más cómodos». El vídeo lo hizo el equipo de Mr. Magú Vídeo.