La boda de Melissa Villarreal y Eduardo en Gijón
«Nos conocimos en Formentera un día de verano por unos amigos en común. Era un viaje de esos en los que no esperas en absoluto conocer a nadie, y me atrevo a decir que para ambos fue una especie de flechazo. Recuerdo pensar ¿dónde ha estado este chico todo este tiempo?. No empezamos a salir hasta unos ocho meses después, pero Edu me escribió todos esos meses insistiendo en tomarnos un vino, y cuánto me alegro de que lo hiciera. Empezamos a salir en abril, y un año después me pidió matrimonio. Siempre digo que conocernos fue divina providencia, un milagro y un privilegio. No hay nada mejor en la vida que encontrar a tu persona, tu confidente y tu compañero para todo lo que la vida pueda traer».
Para el día de su boda cogió al maquillador Miguel Ángel Tragacete.«Su trabajo es impecable, creo que pocos maquilladores saben hacer un look tan fresco y natural. No me quería ver muy maquillada, quería ir como en el día a día, y él lo ha conseguido». Para ese momento llevó una bata de Namur y las alpargatas son de la colección de Castañer x Casilda se casa.
«Mis zapatos fueron a medida de Salo Madrid. No suelo llevar tacones muy altos, así que necesitaba poder adaptar un modelo que me encajase».
El vestido es de Inuñez.«Trabajar con ella ha sido un sueño, es una diseñadora a la que admiro un montón. Me encanta su rollo sofisticado y fresco, nada anticuado. Desde el principio y aún compartiendo un moodboard en Pinterest en donde yo subía inspiración casi a diario, ha conseguido hacer algo único y especial para mí teniendo en cuenta mi estilo personal».
Es un vestido de costura súper delicado y de una ejecución muy compleja. Lleva todo el delantero del cuerpo trabajado con bieses realizados y cosidos a mano uno a uno. En la falda se han utilizado más de distintos tipos de tejido. Luego se creó una capita asimétrica en un tejido de malla de cristal y el velo en organza cristal.
«Los pendientes son de Rabat. Una joya maravillosa que han creado para mí, inspirada en la naturaleza con diamantes en forma de dos flores con gotas».
«Quería llevar un ramo fresco y elegante, solo de un color. Sí o sí quería llevar orquídeas blancas porque son unas flores muy colombianas».
«El traje de Edu fue de Fursac Paris, se lo probó y encajó a la perfección, es un corte clásico, con un aire al Gran Gatsby».
«Nos casamos en los jardines de la finca Villa María en una ceremonia protestante con un pastor cubano (como los abuelos de Edu) amigo de la familia de siempre».
Los niños vistieron de Ussía y los zapatos de Parriego Kids
«Para la música encargamos que sonasen guitarras y alabanzas por Jacob Henson, mi cuñado».
«El catering fue Casa Gerardo. Pedimos su fabada, ostras, arroz con leche, cordero y el vino de cepa 21. Salió todo de maravilla».
Toda la papelería era de El Tintero. «Gracias a Rocío ha sido brutal».
«El DJ de después fue Eloy Bustos».
De las fotografías de la boda se encargó el equipo de Dos más en la mesa y del vídeo Unai Etxebarria.
La boda la ayudo a organizarla Ofelia weddings «La wedding planer y todo el equipo han hecho un trabajo increíble».