La boda de Cristina y Álvaro en Córdoba I
«Todas las niñas sueñan y se imaginan cómo les gustaría que fuese el día de su boda. Yo he tenido la gran suerte de que la mía ha superado con creces todas las ilusiones que me he ido haciendo desde pequeña» comienza explicándome Cristina, la novia de esta boda. «Recuerdo con especial cariño el corto paseo desde la casa hasta la iglesia del brazo de mi padre, las caras de alegría en la iglesia, la felicidad del momento en que vi a Álvaro esperándome en el altar y, a partir de ahí, concentrarme en absorberlo y disfrutarlo todo. ¡Qué rápido se pasa!».
Cristina y Álvaro se casaron en Córdoba el pasado octubre. Los festejos comenzaron el día anterior a la ceremonia con una recepción en la Casa de Salinas de Sevilla, propiedad de la familia del novio, en la que Cristina llevó un vestido de gasa con flores verdes de la primera colección de Intropia Atelier. Cuando la preboda es tan bonita, no quieres imaginarte cómo será la boda.
El día de la boda se celebró en la casa familiar de Cristina en Palma del Rio, localidad Cordobesa. «Poder casarte en la intimidad de tu casa es un privilegio que muy pocos tienen. Nuestra casa, el Palacio Portocarrero de Palma del Rio, es en su origen un alcázar almohade del siglo XI que no fue terminado hasta el XVI y fue prácticamente destruido durante la guerra civil. A lo largo de los últimos 30 años mis padres, con sacrificio y constancia, han hecho una espectacular labor de restauración hasta darle su increíble aspecto actual. Mi madre, una artista con enorme creatividad, organiza a menudo bodas y eventos en la casa, pero esta vez se ha superado a sí misma».
La novia que tiene una belleza clásica que me fascina en cada foto, se preparó en su casa. La maquilló Juan Pedro Hernández y le peinó y colocó la espectacular tiara familiar, Auro Murciano. Mientras se vestía llevaba una bata de La Costa del Algodón.
El imponente vestido de la novia fue una creación de Lorenzo Caprile. Un diseño regio, en el que la novia se sintió como pez en el agua al estar tematizado con la casa. «Álvaro dice que se quedó tan impresionado al verme que necesitó respirar hondo varias veces. ¡Objetivo conseguido!», recuerda. Era de escote bañera, color marfil y realizado con bordados de hilo de seda.
Lo acompañó de un original ramo de nardos.
La ceremonia religiosa se celebró en la Iglesia de la Asunción. La madre de la novia, llevó un vestido de terciopelo azul también de Lorenzo Caprile.
La música de la ceremonia estuvo dirigida por Walter Leonard de Favola in Música. Fueron ocho instrumentos y ocho voces.
El chaqué de Álvaro estaba hecho por su hermano Leopoldo que es sastre. La firma se llama Hoare & Harnden ([email protected]).
Abraham Martínez Fernández (Fundacion Alqvimia Musicae) se encargó de la trompeta barroca y atabla que sonaron desde el balcón de la puerta de las Palmeras. Se interpretaron dos llamadas de trompetas heráldicas desde que los novios salen de la iglesia hasta que entran por la puerta de las Palmeras.
Todas las fotos, que me parecen bastante buenas y naturales, son de Ópalo, unos fotógrafos que trabajan sobre todo en el sur y que estoy segura de que van a dar que hablar mucho.