La boda de María y Gonzalo en Marbella

El vestido de María, la novia, era de Navascués.

Las niñas que la acompañaban llevaban vestidos de El Hada Morgana y los niños de El Parque.

Carlota estaba guapísima con un vestido de estilo griego.

La madre de la novia (a la derecha) estaba espectacular con un tocado de Mimoki.

Las amigas de la novia estaban guapísimas.

Las invitaciones fueron lo más espectacular, en blanco y morado y caligrafiadas… hicieron una especie de libro en Artepapel.
La misa fue oficiada por el Obispo de Bilbao y el sacerdote que casó a los padres de la novia. El mismo con el que María, la novia, hizo la comunión y el que la bautizó.

La música tuvo un papel muy importante en la boda. En la iglesia cantó un coro de Sevilla de 30 niños. Los amigos del novio compusieron una canción para la entrada en la iglesia… ¡Emocionantísimo!. Para terminar la madre de María regaló a los novios un coro rociero para que cantara la Salve a la salida.

Para las flores hicieron un collage a partir de fotos de The Workshop flowers que encontraron en Casilda se casa…y así hicieron los centros.

Lo más complicado fue llevarlo todo desde Madrid: tres camiones con sillas, mantelerías, toda la cristalería. todo el mobiliario, barras de césped, columnas…¡¡¡todo!!! Pero con la ayuda de ATIPICA se convirtió en una tarea más fácil, ¡Son la bomba!.




La fiesta les ayudó a montarla Olivia Valere. ¡Se armó una…!





Como recuerdo, regalaron a los invitados un disco con las canciones que cantaron los amigos del novio y una selección de temazos para bailar.
