Conocerte fue mejor que cualquier cosa

Fue felicidad en estado puro, brutal, natural, volcánico…Qué locura, fue lo mejor del mundo…Mejor que la mejor ruta de cócteles…Mejor que la tortilla de patata y la mejor tarta de queso. Mejor que un viaje a Brasil. Mejor que Pequeña Miss Sunshine, que el final de Como Conocí a Vuestra Madre, que conocer a Mick Jagger o que ser fotografiada por Peter Lindbergh.
Mejor que los andares de Marlon Brando, que la sonrisa de Jude Law, que Steve Mcqueen o Matthew McConaughey. Mejor que Hugh Grant en Nothing Hill, que un día en un spa, que los Reyes Magos, que el armario de Kate Moss o la voz de M. Ward.
Mejor que la resurrección de Lázaro, un concierto privado de Jack Jonhson en una playa en Malibú; mejor que las piernas de Elle McPherson, las letras de Calamaro, que el boom de los Beatles.
Fue mejor que la alegría… mejor que la libertad… mejor que la vida.
(Adaptación de una frase de la película “Quiéreme si te atreves”)
Años después de publicar este post, la ilustradora Lucía Be, hizo esta lámina inspirandose en él.